24 enero 2008

Ladrón de Sonrisas

¿De qué sirve sonreir? No existen motivos para hacerlo.. una vez más..

Alguien se ha robado mi sonrisa.. esa sensación efímera de bienestar se ha ido.
Sí, como una fina línea de tiza, pintada sobre una pared... basta un poco de fricción para eliminarla.
Como un torbellino de viento arraza con el polvo de una tristeza acumulada, simplemente algo pasó que mi sonrisa se desvaneció, fue borrada de mi rostro.

No.. no fue borrada de una manera sencilla, las cosas no funcionan así.
Mi sonrisa fue robada, de una manera repentina y cruel, la arrancaron de mi rostro, con todo el dolor que ello implica.

Como mercancía nueva, reluciente y resplandeciente por haber salido del oscuro cajón donde la tenía olvidada, mi sonrisa brilló unos días, digna de ser mostrada, gracias a una calidez que había surgido, encontró una razón para brillar una vez más.

Sonrisa tonta, ingenua.. una sonrisa creada por una mentira que a mis ojos lucía verdadera. Una sonrisa
sincera en mis labios, que brillaba cada día más gracias a una felicidad frágil y tímida.. una felicidad inocente y pura.

El ladrón acechaba muy de cerca, su miedo aumentaba al ver mi sonrisa crecer. Nunca me lo hubiera imaginado, nunca lo hubiera pensado... saber que había un ladrón en las proximidades, solamente buscando llevarse esa sonrisa.

¿Por qué? ¿Para qué? ¿Qué tiene de malo una sonrisa? ¿Qué toxico, qué dolor puede acarrearse con una sonrisa verdadera.. una sonrisa llena de felicidad genuina? Eso aumentaba el valor monetario.. aumentaría el ego de quien pudiera robársela.

Quien más sino el mismo creador de la sonrisa, sintió el poder de llevarse lo que había creado, el libre derecho de tomar algo que realmente no era suyo, pero para lo cual había contribuído.

Maldito Ladrón, no sólo se llevó una sonrisa, sino mi felicidad en ella. Se robó todo lo que tenía, todo lo que tanto trabajó costó dejar atrás para poder esbozar libremente una, para crear una sonrisa genuina. Se robó todo.

Pobre ingenua, al creer que aún se podía confiar en la gente.

Ahora, para poder salir a la calle e intentar olvidar tal robo ante el evidente velo de tristeza que cubre mis ojos, llevo una falsa sonrisa pegada a mi rostro.. parece real, pero verdaderamente no expresa nada, porque simplemente es una máscara, vacía.. como hasta hace tiempo había sido.

nadH.


*Creo que estoy demasiado triste como para continuar escribiendo, es tanto que no me salen las ideas.. no puedo plasmarlas.. Me siento tan estúpida.

18 enero 2008

Qué hago mal?

Tengo miedo de escribir.. Un miedo que nunca antes había experimentado.
Lo que diga aquí puede interpretarse de mil maneras y causar estragos.. unas simples palabras pueden cambiar la percepción de la vida de muchas personas.. Por eso tengo miedo.

Siento mis manos encadenadas, pesadas.. para variar, me siento triste.

Esa facultad de escribir los pensamientos más bizarros se va desvaneciendo.. todo por el temor.. ¿temor a que?
Nada ni nadie controla mi vida, nadie controla mis pensamientos.. sólo yo soy testigo de lo que realmente ocurre conmigo, soy el único velador de mis recuerdos, el código real para descrifrar lo que realmente significan todos los relatos.. Sólo mi mente y yo.

Qué hago mal? Por qué la depresión? Por qué las lágrimas?
No lo entiendo.. todo estaba tan bien.. y Una vez más.. se derrumba.
Qué hice mal?